La coronela Ysabel Santos, que estaba al mando del Canódromo en el momento del incidente contra el defensor del pueblo decidió dar la cara. Esta mañana hizo una llamada al programa de radio el Sol de la Mañana que se transmite por zol 106.5 fm.
Si evaluáramos su participación podríamos decir que hizo como la media: “abrió la boca pa meter la pata”. ¿Qué dijo la coronela?
En primer lugar, afirmó que desconocía quien era el defensor del pueblo y que tampoco sabía de esa figura. Según ella lleva 35 años en la Policía donde ha servido en varias posiciones sin ningún señalamiento.
Justamente por su pulcritud la enviaron al Canódromo para terminar con una mafia que había ahí. Esa mafia cobraba entre 5 y 10 mil para devolver un vehículo o motocicleta a una persona.
Desde que ella llegó dice que la primera acción que tomó fue que todo el que fuera a retirar un vehículo debía llevar su documento. Sin restarle méritos a la coronela nos preguntamos ¿acaso no es eso lo que dice la ley?
Afirma que estando en su oficina (luego dijo que fue en el baño) le dicen que había entrado una turba. Es ahí donde ella sale con un palo de golf que siempre lleva consigo pues, supuestamente, no porta arma de fuego.
Posteriormente dice que a ella también la agredieron, la lanzaron al piso mientras la golpeaban e incluso hasta tiene un yeso.
También alega que otras agentes, fueron agredidas por una turba durante el referido incidente.
En imágenes que han circulado en las redes sociales se observa como la coronela y otras agentes presentan yesos y vendajes en distintas partes del cuerpo. Así como hematomas por supuestos golpes propinados durante el forcejeo con el defensor del Pueblo.
Sin embargo, en los videos que se han observado lo que sí se ve es cuando un señor agrede al defensor del pueblo y sus acompañantes. Para colmo de males también borraron evidencias de los celulares de los periodistas.
Ya veremos en qué irá a parar todo esto pues no pinta nada bueno sobre todo para la DIGESETT.