Crece la expectativa entre los brasileños ante los resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales. El foco, claramente, está puesto en el ex mandatario Luiz Inácio Lula da Silva -el favorito en todas las encuestas-. Y el actual presidente Jair Bolsonaro; dos archirrivales con dos visiones totalmente opuestas de Brasil.
El contexto hace que el país esté en una tensa espera, ya que este mismo domingo podría conocer a su próximo jefe de Estado. De acuerdo a los datos aportados por las encuestas que se difundieron en los últimos tiempos, Lula podría imponerse incluso en primera vuelta. Algo que no ocurre desde 1998, mientras que Bolsonaro insiste en que los sondeos mienten y ha dejado planear dudas sobre si aceptará el resultado. Incluso alega un posible fraude.
Luego de cerrados los comicios, el Tribunal Superior Electoral (TSE) comenzó a difundir los resultados. Con el 88,55% de los votos escrutados, Lula obtiene el 47,20% de los votos, y Bolsonaro el 44,20%. De confirmarse la sorpresiva tendencia habría ballotage el próximo 30 de octubre.
Como se esperaba, el resto de los candidatos se ubican muy lejos de los principales aspirantes. Simone Tebet, del Movimiento Democrático Brasileño, y Ciro Gomes, del Partido Democrático Laborista, apenas superan el 4 y 3%, respectivamente. Los otros siete, en tanto, no logran pasar el 1%.